Aunque los ácidos grasos esenciales son fundamentales para el cuerpo, el organismo no tiene la capacidad sintetizarlos, razón por la cual resulta necesario obtenerlos mediante la alimentación.
Cabe señalar que los ácidos grasos están presentes en las diversas clases de lípidos que requiere el ser humano, incluyendo los saturados y los mono insaturados, e incluso los poliinsaturados, siendo a este último que pertenecen.
La principal función de estos ácidos consiste en promover la conexión apropiada entre el sistema nervioso y las neuronas, y además de esto, hay que decir que existen ciertos ácidos grasos más esenciales para el organismo que otros, y es justamente de ellos que hablaremos en este post.
¿En qué consisten los ácidos grasos esenciales?
Los ácidos grasos esenciales se distinguen por ser esos ácidos grasos los cuales el organismo es incapaz de sintetizar, es decir, de producir de forma natural y en consecuencia, deben conseguirlos cada día a través de la dieta. Asimismo, es importante señalar que es posible obtener ácidos grasos, especialmente, a través del pescado, sin embargo, esta no se trata de la única fuente.
De igual manera, hay que decir que estos ácidos grados destacan por ser indispensables para la vida, debido a que cuentan con una función esencial que ayuda a garantizar el desarrollo apropiado del organismo, por lo que el tener una alimentación diaria con un reducido aporte de ácidos grasos esenciales, puede terminar afectando directamente a la salud general.
En este sentido, dentro de las consecuencias que pueden surgir a causa de la falta de ácidos grasos en el cuerpo, se incluyen por ejemplo, la artritis, dermatitis, reacciones alérgicas, hiperactividad, jaquecas, insomnio, etc.
¿Cuáles son los ácidos grasos más esenciales en el cuerpo?
Los ácidos grasos esenciales forman parte de los ácidos grasos poliinsaturados, y se dividen en 2, los cuales consisten tanto en los ácidos grasos Omega-3 como en los ácidos grasos Omega 6.
Su ingesta a través de la alimentación diaria resulta indispensable, debido a que son los encargados de hacer que el organismo obtenga un componente básico, el cual no puede producir de manera natural:
Omega-3
Los ácidos Omega-3 se distinguen por actuar, sobre todo, en el sistema nervioso, fomentando su adecuado funcionamiento, ya que forman parte tanto del cerebro como de los impulsos nerviosos.
Sin embargo, no tienen únicamente esta función, sino que además actúan en el sistema inmunológico, la producción de hormonas, e incluso la vista, etc.
Es apropiado decir, además, que si bien los pescados (salmón, sardina y caballa) cuentan con un alto aporte de ácidos grasos esenciales Omega 3, al igual que ciertos mariscos (langostinos y ostras).
Lo cierto es que además de los productos marinos, es posible obtener este ácido graso a través de diversos frutos secos, sobre todo, de las nueces y otras semillas un poco menos populares, como las de lino y las de chía.
Asimismo, los aceites vegetales destacan por ser una excelente fuente de omega 3, principalmente el aceite de oliva, al igual que otros menos usados como, por ejemplo, el aceite de soja. Hay otra serie de alimentos con omega 3 que pueden ayudarte junto a los aceites vegetales.
Pero no solo ellos son una gran fuente de dichos ácidos grasos, sino que también es posible obtener un gran aporte a través de las verduras de hoja verde, sobre todo de las espinacas y el aguacate.
Omega 6
Los ácidos grasos Omega 6, por otro lado, resultan sumamente beneficiosos para la salud cardiovascular, además de ayudar a mantener el colesterol bajo control, y también a evitar el desarrollo de la alopecia, etc.
Y aunque este ácido graso en numerosas ocasiones suele pasar desapercibido, lo bueno es que por lo general se encuentra presente en aquellos alimentos donde también se incluye el Omega 3, como es el caso, por ejemplo, de las nueces, el aguacate y la soja. Sin embargo, existen distintos frutos secos donde es posible conseguir buenos aportes de ácido graso Omega 6, incluyendo los pistachos y algunas semillas como por ejemplo, las pipas de girasol.
Ácido butírico
Asimismo, otro ácido graso de gran importancia dentro del organismo consiste en el ácido butírico, el cual además de poder obtenerlo mediante la dieta diaria, suele ser igualmente producido por el cuerpo a partir de ciertos carbohidratos.
Sus beneficios en el organismo suelen encontrarse asociados a una mejora de digestión, tratamientos contra el cáncer, prevención de la obesidad, entre otros.
¿Qué beneficios ofrecen los ácidos grasos?
Entre los beneficios principales que ofrece el consumo de alimentos que cuenten con un aporte de ácidos grasos esenciales, destaca especialmente la protección del sistema cardiovascular.
En este sentido, debido a las propiedades anticoagulantes y antiinflamatorias que poseen, el consumo de Omega 3 y Omega 6, ayuda a disminuir los niveles de colesterol, al mismo tiempo que reducen los triglicéridos y la presión arterial.
Asimismo, el Omega-3 resulta de gran ayuda para disminuir el riesgo de infartos cuando su consumo a través de la dieta diaria se encuentra complementado con otros hábitos saludables de vida, como por ejemplo, el realizar ejercicio.
En el caso del Omega 6, se puede decir que el mismo posee varias características que no suelen ser muy conocidas por la mayor parte de las personas, ya que consiste en una grasa que, debido a sus propiedades antiinflamatorias, a cierta edad, permite hacer frente a los síntomas asociados con ciertas patologías como, por ejemplo la artritis reumatoide y la osteoporosis, e incluso ayuda a controlar los valores de insulina.
